sábado, 24 de septiembre de 2016

EL RENACIMIENTO DE UN IMPERIO (EPISODIO #261)


A paso lento cruzábamos el campo desierto. Me estaba durmiendo. Era mejor conciliar el sueño que acallar los desgarradores gruñidos de mi estómago ávido de alimentos. Montábamos a caballo en la misma posición en que habíamos huido del ritual indio. Es más, el mono iba colgado de mi pierna derecha como una pulsera de muñeca. Prácticamente ya era como elegir los mismos asientos, pese a que no comíamos en el lomo de Ringo. Ni los chillidos del águila lograban desvanecer el bienvenido letargo de mis sentidos suspendidos.