“Just Friends"
Y la noche dejó de caer, ya no estaba
echado en la confortable alfombra de mi habitación, estaba parado en el baño,
frente a ese espejo roñoso que, por encima del lavabo, resistía mi tempestad emocional. Los azulejos eran de Brasil. Tus caprichos eran insoportables pero
me ayudaban a vivir. ¿Recordás cuando me pediste aquel elefante de Portugal?
Lindo viaje el del elefante, pero ya murió, o feneció, mitad humano, mitad
animal. Los asuntos relevantes siempre tienen un desenlace, o un final, como
vos, que me dejaste solo entre estos azulejos, maldita mariposa fugaz, la noche
que huiste no fuiste capaz de decirme adiós, o “good bye”. Así solías
despedirte. Y ahora, en una nueva noche gris, quiero recordarte que Charlie
Parker tenía razón: éramos sólo amigos,
éramos “just friends”.
Observación: el
autor recomienda escuchar “Just Friends”, de Charlie Parker (el negro sin voz).